Pinocho de Guillermo del Toro ganó este domingo el Oscar a mejor película de animación. El director mexicano obtuvo de esta forma la tercera estatuilla de su trayectoria.
«Pinocchio» es uno de los proyectos más personales del mexicano y hacerla le tomó la mitad de su carrera como cineasta por el esmero artesanal que le tomó hacer un filme de animación foto a foto («stop-motion»).
La cinta narra la clásica historia del niño de madera que no podía mentir sin que le creciera la nariz, pero con un giro más profundo en el significado de la vida.
El mexicano agradeció a Netflix, plataforma de la cinta, y dedicó el premio a su esposa, sus hijos y sus difuntos padres.